Ya es oficial, os puedo anunciar que pronto estarán a la venta las entradas para mi primera presentación presencial en Carbajosa de la Sagrada, Salamanca.
Las entradas son gratuitas, y estarán disponibles hasta completar aforo. La web del ayuntamiento las proporcionara en su apartado de eventos.
También nos acompañara la bookstagrammer LadyBooks, para hacer más entretenida la velada y hablar sobre su trabajo y lo importante que son las reseñas para los autores.
Será un día entretenido, divertido y diferente. Gracias al verano cultural del ayuntamiento de Carbajosa de la sagrada. Estáis todos invitados el viernes día 13 de agosto a las 20 PM al salón de actos del ayuntamiento.
Estaré avisando por mis RRSS y twitch de los avances, pero recuerdo que no queda mucho para que llegue el día. Hasta entonces me despido oscuros.
El reto número 6 pide que realicemos un relato del subsuelo.
Me dirijo a mi sesión diaria de rayos de sol, que tengo que adquirir del solárium creado en la ciudad donde vivo con mi familia Beusslou. Hace 200 años que una explosión del Sol, hiciera que fuese imposible vivir en la superficie de la tierra. No daban muchos años de vida a la tierra sin él, pero aprovechando los recursos que nos quedaban y fragmentos de la explosión… Pudieron crear bajo tierra una nueva manera de subsistir. Muchos llamaron a estos científicos que nos salvaron y aún continúan locos, yo les llamo papá y mamá. Desde que tengo uso de razón convivo con ellos en la planta de los laboratorios, todo por tener controlado todo el tiempo nuestro nuevo sol interno. Todo el mundo cree que nos vamos a quedar aquí, hasta que nos quedemos sin recursos y la tierra no aguante más el frío del universo. Yo creo que como el fénix que renace de sus cenizas, Lorenzo hará lo mismo. O sin nada donde seguir una órbita, la tierra encontrará por el camino pero sol más grande y luminoso. De momento os iré enseñando un poco el lugar donde vivo. En lo que empezamos este tour, diré que mi ciudad está situada más o menos a (**)metros bajo tierra. Antes de que el supuesto fin del mundo llegara vivía en Soria, y que yo espero que al igual que nosotros hemos conseguido salvarnos de esta manera, en otros lugares también. Bueno empezaremos por el principio, la puerta principal. Completamente sellada de forma hermética con un metal de fuerte resistencia. Aquí nadie sube, solo están los guardias vigilando.
—Naira, ¿Qué haces aquí? Ya sabes que nadie puede estar en la puerta.— El guardia más corpulento y tierno de toda la ciudad siempre preocupándose de que no la lie.
—Tranquilo Roberto, solo estoy dando un paseo con mi cámara, mostrando donde vivo.
—¿Realmente sigues creyendo que alguien re fuera de aquí verá eso? ¿Cómo piensas mandarlo?
—Parece mentira que no me conozcas en estos 18 años. Tú entraste a formar parte del equipo de seguridad y yo soy la informática de la sala de control. Soy algo más que belleza muchacho. —Él se echó a reír, después nos despedimos con un gesto corto y yo continué mi camino. Continuamos por la zona de motores, donde mueven la electricidad por cada punto de esta ciudad tan atípica. Y también se encargan del oxígeno y la forma de moverlo por todo el subsuelo sacando el CO₂. Se puede ver a Harold hacer el trabajo de control, verificando que nada falle. Me gustaría seguir hacia la sala de informática, vinculada al área de seguridad. Ambas son importantes, mi trabajo es verificar que todos los escudos selladores, tanto para el oxígeno o el control de cualquier fuga… es para evitar que otros entren (aunque sería imposible, la vida fuera es imposible). Mientras mi trabajo es en varios ordenadores, los guardias de seguridad comprueban las cámaras asegurándose que todo es correcto. La siguiente sala más adelante son oficinas y despachos de gente más importante y que gamas llegue a conocer. Y bajando por las plantas vamos encontrándonos con mucha diversidad de tiendas. Continuando por las aulas de aprendizaje y la zona de salud. Acabamos en las viviendas o cápsulas. Y creo que no se me olvida nada… debería de volver a mi puesto. Antes de que pueda volver a mi puesto de trabajo. Un gran sonido colisionó con la puerta principal, por las cámaras de seguridad y el programa de bloqueo todo parecía correcto. No volvió a tardar, un gran estruendo azotó la puerta. Las cámaras exteriores no registraban nada.
—¿Roberto? Activar los infrarrojos, veamos que nos dicen.—Él asiente, y no tardaría en salir en la pantalla una gran masa de calor sin forma.
—¿Qué rayos es eso?
—En el programa sale como desconocido. Tardaré un rato en que el programa sea más efectivo y nos diga de que se trata.—Me daba prisa por parar aquella cosa que se disponía a hender nuestro hogar. Ese era mi trabajo hacer segura la puerta con todos mis medios. El ordenador comenzaba a dar fallos que yo iba corrigiendo y es que con cada embestida un nuevo error debilitados mi configuración. Escondía un as bajo la manga, mire a Roberto y le pase el control de mi teclado y después le di mi libreta abierta por el lugar exacto.
—¿Qué hago?
—Meter los códigos, yo pasaré los mismos de forma manual en la puerta.—Recogí el falseado de software y varias herramientas para poder verificar las claves de forma manual en la puerta, y fui en esa dirección. Subí la escalera de emergencia hacia el panel de la puerta, fuera la masa invisible continuaba empujando intentando abrir el acceso a nuestra civilización escondida. Las claves que introducía me daban error y la comunicación con Roberto por el pinganillo era nula, el pavor que sentía crecía y la accesibilidad hacia nosotros se incrementaba. No podíamos hacer nada ante esa cosa, y abajo nuestros familiares, amigos y vecinos no sabían nada. Cuando estaba probando el último código, el sonido de los engranajes me confirmaba que posiblemente hubiese funcionado. O eso creí porque el último golpe fue el definitivo y la masa invisible traspasó la puerta y con ella me absorbió a mí. No sé que pasó después de eso, solo vago como en un círculo infinito por una nada de soledad y desesperación. Donde el anhelo me hace seguir buscando una salida.
El reto número 6 pide que realicemos un relato del subsuelo.
Me dirijo a mi sesión diaria de rayos de sol, que tengo que adquirir del solárium creado en la ciudad donde vivo con mi familia Beusslou. Hace 200 años que una explosión del Sol, hiciera que fuese imposible vivir en la superficie de la tierra. No daban muchos años de vida a la tierra sin él, pero aprovechando los recursos que nos quedaban y fragmentos de la explosión… Pudieron crear bajo tierra una nueva manera de subsistir. Muchos llamaron a estos científicos que nos salvaron y aún continúan locos, yo les llamo papá y mamá. Desde que tengo uso de razón convivo con ellos en la planta de los laboratorios, todo por tener controlado todo el tiempo nuestro nuevo sol interno. Todo el mundo cree que nos vamos a quedar aquí, hasta que nos quedemos sin recursos y la tierra no aguante más el frío del universo. Yo creo que como el fénix que renace de sus cenizas, Lorenzo hará lo mismo. O sin nada donde seguir una órbita, la tierra encontrará por el camino pero sol más grande y luminoso. De momento os iré enseñando un poco el lugar donde vivo. En lo que empezamos este tour, diré que mi ciudad está situada más o menos a (**)metros bajo tierra. Antes de que el supuesto fin del mundo llegara vivía en Soria, y que yo espero que al igual que nosotros hemos conseguido salvarnos de esta manera, en otros lugares también. Bueno empezaremos por el principio, la puerta principal. Completamente sellada de forma hermética con un metal de fuerte resistencia. Aquí nadie sube, solo están los guardias vigilando.
—Naira, ¿Qué haces aquí? Ya sabes que nadie puede estar en la puerta.— El guardia más corpulento y tierno de toda la ciudad siempre preocupándose de que no la lie.
—Tranquilo Roberto, solo estoy dando un paseo con mi cámara, mostrando donde vivo.
—¿Realmente sigues creyendo que alguien re fuera de aquí verá eso? ¿Cómo piensas mandarlo?
—Parece mentira que no me conozcas en estos 18 años. Tú entraste a formar parte del equipo de seguridad y yo soy la informática de la sala de control. Soy algo más que belleza muchacho. —Él se echó a reír, después nos despedimos con un gesto corto y yo continué mi camino. Continuamos por la zona de motores, donde mueven la electricidad por cada punto de esta ciudad tan atípica. Y también se encargan del oxígeno y la forma de moverlo por todo el subsuelo sacando el CO₂. Se puede ver a Harold hacer el trabajo de control, verificando que nada falle. Me gustaría seguir hacia la sala de informática, vinculada al área de seguridad. Ambas son importantes, mi trabajo es verificar que todos los escudos selladores, tanto para el oxígeno o el control de cualquier fuga… es para evitar que otros entren (aunque sería imposible, la vida fuera es imposible). Mientras mi trabajo es en varios ordenadores, los guardias de seguridad comprueban las cámaras asegurándose que todo es correcto. La siguiente sala más adelante son oficinas y despachos de gente más importante y que gamas llegue a conocer. Y bajando por las plantas vamos encontrándonos con mucha diversidad de tiendas. Continuando por las aulas de aprendizaje y la zona de salud. Acabamos en las viviendas o cápsulas. Y creo que no se me olvida nada… debería de volver a mi puesto. Antes de que pueda volver a mi puesto de trabajo. Un gran sonido colisionó con la puerta principal, por las cámaras de seguridad y el programa de bloqueo todo parecía correcto. No volvió a tardar, un gran estruendo azotó la puerta. Las cámaras exteriores no registraban nada.
—¿Roberto? Activar los infrarrojos, veamos que nos dicen.—Él asiente, y no tardaría en salir en la pantalla una gran masa de calor sin forma.
—¿Qué rayos es eso?
—En el programa sale como desconocido. Tardaré un rato en que el programa sea más efectivo y nos diga de que se trata.—Me daba prisa por parar aquella cosa que se disponía a hender nuestro hogar. Ese era mi trabajo hacer segura la puerta con todos mis medios. El ordenador comenzaba a dar fallos que yo iba corrigiendo y es que con cada embestida un nuevo error debilitados mi configuración. Escondía un as bajo la manga, mire a Roberto y le pase el control de mi teclado y después le di mi libreta abierta por el lugar exacto.
—¿Qué hago?
—Meter los códigos, yo pasaré los mismos de forma manual en la puerta.—Recogí el falseado de software y varias herramientas para poder verificar las claves de forma manual en la puerta, y fui en esa dirección. Subí la escalera de emergencia hacia el panel de la puerta, fuera la masa invisible continuaba empujando intentando abrir el acceso a nuestra civilización escondida. Las claves que introducía me daban error y la comunicación con Roberto por el pinganillo era nula, el pavor que sentía crecía y la accesibilidad hacia nosotros se incrementaba. No podíamos hacer nada ante esa cosa, y abajo nuestros familiares, amigos y vecinos no sabían nada. Cuando estaba probando el último código, el sonido de los engranajes me confirmaba que posiblemente hubiese funcionado. O eso creí porque el último golpe fue el definitivo y la masa invisible traspasó la puerta y con ella me absorbió a mí. No sé que pasó después de eso, solo vago como en un círculo infinito por una nada de soledad y desesperación. Donde el anhelo me hace seguir buscando una salida.
Reto 4 de 52 del 2021: Historia de amor entre dos especies fantásticas.
La luna de Øniwa y las almas de fuego.
No siempre tiene que ser dulce como el algodón de azúcar, ni tierno como un gatito. Del mundo de donde vengo, la oscuridad es lo más bello, el fuego demuestra pasión y mi apellido es la fuerza de todo ese pilar. Mi vida comenzó como la de cualquier otro humano normal, con la diferencia de que yo no soy humana. Aunque si soy nacida y criada en la tierra, en una pequeña isla italiana… Mi raza es más antigua que el planeta donde he vivido toda mi vida. Provengo de dos mundos enfrentados por sus propios creadores. Y cuando se enteraron de mi existencia con una prohibición de viajar hasta allí no les bastaba… La ejecución es su única alternativa. Pero desde luego yo era más fuerte, pero ni ellos lo sabían, ni yo tampoco. Recibí mucha ayuda entre ellos estaba él. Dassaë es un joven Gnódra de Le Bramso, o las sombras. «El día que le vi por primera vez, sentía que el corazón se saldría del pecho. Y escuchaba sus dos corazones latir con la misma o incluso más intensidad. No hizo falta hablar, solo nos fuimos acercando hasta que nos rozamos la piel uno al otro. Sus ojos desprendían fiereza, cambiando incluso de color. Su transformación no era al cien por cien, pero tenerme al lado le tenía tan nervioso que no podía controlar su aspecto del todo. Mi piel se ponía de gallina al contacto con la suya, todo iba tan despacio que parecía que se había parado el tiempo por completo.
—No sé que deseo más, si comerte a besos o comerte sin más.—Dijo él lanzándose sobre mí. Sus colmillos rozaban mi cuello, haciéndome tener descargas por toda mi columna.
—Podemos decorarnos mutuamente.— Al decir la última palabra mi apariencia Celesiaca(como yo le apodera mitad celestial mitad demoníaca) apareció. Él se retiró durante unos segundos, pero después nos volvimos a lanzar uno sobre el otro convirtiéndonos en uno solo. Finalmente pude ver como por momentos su piel escamada brillaba bajo la luz de la luna Øniwa en el bosque de almas de fuego. Siendo dos seres con esa misma característica lo que tapaba nuestra desnudez fue consumido por las llamas.
—¿Qué ser eres?—Preguntaba él una vez pusimos fin a nuestra pasión. Y nuestras bocas dejaron tiempo para algo más que estar pegada una a la otra.
—Aquella nacida de luz y sombra. A la que todo el mundo llama Ersaiku.— Él no habla, solo me mira, ni siquiera parpadea.
—¿Tienes miedo Dragón?—Me miro, me acaricio el rostro y después me sonrió.
—Claro que no, es solo curiosidad. Desde luego que eres única, y estás aquí conmigo. De nuevo se abalanzó sobre mi boca, dejando por el camino un rastro de besos por mi cara y mi cuello. Continuo otro rato más, después sin cansarnos el uno del otro volvimos a resguardarnos en el calor que nos aportábamos uno al otro. «Era tan reconfortante». Cuando me tuve que separar de él y volver a mi vida, ahí supe entonces que Dassaë era especial, aunque no se tratara de la realeza, ni siquiera un alto cargo de consejo Feesaiku. Estábamos destinados a estar juntos, pero eso me pasa con casa ser que comparto algo, mi madre me lo dice siempre. Demasiado enamoradiza, siempre lo doy todo.”
Ayer en twitch.tv hice junto a mi compañero y autor J.A. Vilavert, una presentación en directo. Ahora mismo se está compartiendo en todas nuestras RRSS, para que podáis disfrutar del video.
Compartiré mis presentaciones en mi canal de twitch, como Aneizar.
También avisaros que el 7 de noviembre del 2020 a las 22H península haré un directo junto a mi compañero J.A. Vilavert.
El libro ya lleva un par de días a la venta, y ya pude ver a las primeras lectoras contentas enviándome historias del envio en instagram y post en Facebook.
Y otro orgullo es ver que ayer estábamos en el puesto 25 en Amazon.
Espero que os gusten las novedades, y que si os agrada la novela no dudéis en haceros con ella.
Y ya se reveló el titulo de la misma. Me da gusto presentaros a la que será la novela que pronto verá la luz…
«Del oscuro infierno al descanso eterno».
Así que aquí abajo os dejo un atajo al Link de la entrevista y disfrutarla mucho.
No os olvidéis de compartirla en vuestras RRSS y dejar un comentario en el mismo blog.
Queridos lectores,
nos complace presentaros a la autora salmantina Azucena García Calvo, más conocida en las redes sociales como Aneizar. Ella ha venido para mostrarnos un poquito sobre sí misma y su próxima novela Del oscuro infierno al descanso eterno. Una intrigante obra en la que nada es lo que parece, y donde las suspicacias surgen desde el primer momento.
Esta inquietante novela, con ciertos aires tenebrosos, estará lista para su disfrute muy pronto, y os aseguramos que hará las delicias de los lectores ávidos de fantasía y magia. ¿Queréis saber más? ¡Vamos allá!
(Para continuar leyendo haz clic en el enlace de la foto 《K》).
Hace unos días me uní a Kivirediciones para la publicación de mi novela. Ahora a tener paciencia y más adelante os podré contar algo. Ahora os tendréis que esperar.
Espero todo esto con mucha ilusión y también con mucho apoyo. Gracias a las RRSS he conocido gente de todo tipo, que no solo te ayuda y avanzas con ello. Si no que creas amistad.
Tengo mucha gente con quien compartirlo, pero me acuerdo de ti, de como tú me apoyabas siempre con mis escritos y leías cada uno de ellos. Que sé que ahora no estas aquí, pero donde quieras que estes sé que estarás muy contenta por este pequeño logro. Gracias porque asesar de todo, ahí estabas.
Pensaba que este 2020 iba a acabar igual que empezó, siendo un desastre… Pero parece ser que después de unas rachas malas en estos dos años, tienen que venir las buenas.
No os puedo contar nada, pero la verdad que me muero por deciros todo. Solo que hay cosillas de este proyecto antiguas en el blog, y que no sabemos como continuaran dentro de la historia.
A los que me seguís gracias, porque teniendo estas locuras en mi cabeza aquí seguís.
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